domingo, agosto 19, 2007

A SU ENCUENTRO


- Llegué hoy en la mañana, te espero (se escucha la voz al otro lado del teléfono).
- Me atrasé un poco, ahora voy saliendo (Manuel cuelga el teléfono).
Se viste con esa polera blanca con tonos azules, su pantalón café claro con varios bolsillos y las zapatillas verdes. Mochila pequeña al hombro y se encamina al encuentro de aquella voz. Santiago de mañana muestra ríos de gente, Manuel ya es parte de ese río, camina observando al señor de corbata extraña cruzando la calle con la luz del semáforo en rojo, a la pareja de jovencitas despidiéndose con un beso en la boca, la señora distinguida de traje azul 2 piezas, el pantalón blanco con líneas celestes que cubre una perfecta figura femenina, un tipo que camina buscando nada, los grandes edificios, grandes casas comerciales, el comerciante que vende relojes falsos, la señora de los libros falsos, un par de señores con traje hablando en voz alta jugando a ser los dueños de la verdad. Manuel por un momento recuerda a la dueña de esa linda voz, ese pelo largo y suelto, una mujer audaz, con la feminidad que solo ella tiene. Cada vez que piensa en ella se le viene a la mente esa frase: “Dicen las lenguas creativas cosas divertidas”. Ya no está en Santiago, sabe que se encuentra cerca de La Ligua, por que es acosado por “las palomitas”, sigue su camino, atravesando un trozo extenso de desierto al norte de Chile.
Llega a Antofagasta pero evita pasar, los recuerdos son muchos. Continua rumbo a Calama, ya se siente en casa, el desierto lo acoge como un hijo, esa pampa de Sierra Gorda siempre lo recibe con una infinidad de remolinos que se ven a lo lejos, son gigantes que le dan la bienvenida. Ahora en Calama y siente la cercanía de esa pequeña alma pura, esa pequeña que es una fuente de alegría para su familia. Ya está cerca de su destino, camino a San Pedro de Atacama se detiene en ese arbusto que esta en pleno desierto con un cartel: “Dame agua”. Accede a esa petición, como siempre lo ha hecho, y le regala la poca agua que lleva. Sube la cordillera de Domeyko, a su derecha está el cerro kimal, lugar de ceremonias de los pueblos originarios de la zona, el frió es intenso. Baja por el llano de la paciencia, un llano casi infinito, lugar donde se perdían cantidades inmensas de cabezas de ganado provenientes de Argentina en los tiempos del salitre. Sube por la cordillera de la sal, lugar único en el mundo de una magnifica belleza, como siempre el mirador es visitado por turistas extranjeros, al cruzar el sector busca esa figura que un buen amigo bautizó como la cara del dinosaurio. Por fin llega a San Pedro de Atacama, es media tarde, los árboles de mediana altura están totalmente quietos, no se les mueve una rama, busca el lugar donde ella lo esta esperando. La ve en la entrada del hotel, sentada en ese banco de madera, a la sombra de un viejo árbol leyendo un libro, viste con una franelita blanca, hombros descubiertos con un par de tirantes delgados, pantalones con el color del desierto, con muchos bolsillos, como los de Manuel. Lleva sandalias, y un pañuelo cubre su pelo que deja ver su linda cara, esos ojos grandes, su sonrisa generosa, sus rasgos finos. Cierra el libro, se pone de pie con una botella de agua en su mano. Manuel se acerca, sus miradas no se despegan, ella sonríe, abre la botella, se la ofrece, se sientan bajo ese árbol viejo, ya es tarde noche. Manuel cruza su brazo por el hombro de su linda compañía, el sol ya se fue. Por la cordillera de Los Andes asoma tímidamente la luna y de a poco el cielo se llena de estrellas, están tan cerca que se creen capaces de poder tomarlas con la mano. Ya es de noche y ellos sentados y abrazados bajo ese árbol viejo, se miran y sonríen, todo es tal cual como lo habían soñado.

sábado, agosto 18, 2007

ANGEL EN UN SUPERMERCADO (Génesis)

Domingo de un fin de semana santa en la ciudad de Santiago, 10 de la mañana y un silencio impactante, no hay ruidos de motores, no se escucha gente en la calle, de pronto un pájaro canta a lo lejos, el cielo está despejado, temperatura agradable, el viento aun duerme, el sol ilumina las calles desiertas... sigo despertando, el silencio ya es demasiado: donde esta el control remoto??.. (aquí estaaa!).. paf, prendo la TV.. mmmm domingo de semana santa... no es precisamente lo que quiero ver, sigo buscando canales mmm nada.... apago la TV.... la radio!!! (cuidado: semana santa) mm.. donde están mis discos??.. (aquí estaaaan!!).. algo had doc para el día, algo suave pero ni tan suave, "curiosamente" un disco de Pedro Aznar, mi buen amigo Pedro es el indicado... cuando no tenia nada deseeeeee...!!!! cantaba entrando a la ducha... cuando no tenia nada deseeeee!!!.. cantaba saliendo de la ducha... entrando en una polera camino a la cocina, con ganas de un buen desayuno, imagino que manjares me esperan en el refri... ups! mantequilla, un limón seco, tomates blandos, un par de zanahorias arrugadas... hago memoria: cierto , esta semana llegue solo a dormir... miro la hora: estará abierto el supermercado?? , solo hay una forma de saberlo, por Internet!! .. medito un poco, en realidad hay más formas de saberlo... tomo mis lentes oscuros y ya me encuentro circulando por las calles desiertas camino al supermercado.. a lo lejos una persona caminado lento, ya no estoy solo... me acerco, y es una abuelita: buenos días!!!.. buenos días joven!!... de esos saludos que alegran aún mas el día.. sigo caminando y una pareja de abuelitos.. mm.. 3 abuelitos en una cuadra, que simpático.. no no.. no son 3, son 5.... que esta pasando?... entro al supermercado y en su mayoria veo cabezas blancas, bueno tambien cabezas negras con caras arrugadas (en esa lucha contra la naturaleza, contra el tiempo)... entonces a lo que vine!.. dónde esta ese queso en caja, un jugo, pan, carne para el almuerzo, empanadas, un ángel... un ángel?, me pareció haber visto uno ... mmm semana santa, de algo estoy contagiado... llego a la fila para pagar... uf, que larga.. paciencia, son abuelitos.... busco la mas corta, dejo el canasto en el piso levanto la mirada y la vi.. es verdad, vi un ángel!!.. parada dos puestos antes que yo está ella, unos ojos café claros, pelo castaño y liso que llega un poco mas abajo de sus hombros, el sol que entra por un ventanal dibuja a contraluz su silueta.. quedo hipnotizado por unos segundos, ella se da cuenta y desvío rápidamente mi mirada hacia una promoción de detergente barato... miro de reojo y ya se había dado vuelta.. recupero mi posición... la miro de cabeza a pies.. la fila avanza, ella se agacha a mover su canasto, la abuelita que esta entre nosotros tambien mueve el suyo, ella gentilmente la ayuda, con mi pie muevo el mío... se arma un dialogo entre ella y la abuelita, yo escuchando y pensando: ¿quien es? ¿de donde es? ¿dónde están sus alas? ¿y que no tienen aureola?.. seguimos esperando en la fila, me llama la atención una pareja de abuelitos de la otra fila, me quedo mirándolos un poco... ATENCION! algo pasa!! siento una mirada... volteo hacia el ángel y ella rápidamente pierde su mirada en la misma promoción de detergente barato... me estaba mirando??, no estoy seguro... miro tras mío y una abuelita me regala una sonrisa.. si!!.. me miro!... sin pronunciar palabras se pueden decir muchas cosas... ella esta pagando, ordena sus cosas en las bolsas, todo lo hace lentamente sabiendo que la estoy mirando... y empieza el sufrimiento interno: espérame!! espérame!! .. señora por favor apúrese, pague luego!!!. no te vayas!! .. señorita cajera mas rápido por favor!! no te vayaaaasss!!... salió del super y se va lentamente por una calle dirección este... salgo del supermercado, ya ha pasado mucho tiempo, voy a tomar mi calle dirección norte... y si voy al este??.. no pierdo nada.. me asomo por la calle y el tiempo se detuvo.. ella va a mitad de cuadra cruzando lentamente hacia la otra vereda, voltea su mirada hacia mi.. es preciosa... que esta pasando?.. se esta regresando!!.. vuelve a la vereda por donde voy... que le digo, que le digo??? ehhh. carolina!!! como estas??!!.. no no.. mm perdón, te conozco de antes ??. no no.mm y si hago chocar mis bolsas con las suyas??.. no no mm.. ya es tarde, estamos a 2 metros, nos cruzamos buscando nuestras miradas.. pasa por mi lado.. me detengo.. volteo.. suspiro profundo... y digo: Hola.. ella me mira y es como si estuviéramos en otra dimensión, en otro mundo, nuestro mundo.. responde a mi saludo: Hola... Fueron semanas maravillosas, el otoño fue primavera., el invierno fue verano. De niño supe que los ángeles pertenecen al cielo, y que de vez en cuando bajan a darse una vuelta y observar a los mortales. Es por eso que este ángel tuvo que volver de donde vino, yo no lo entendía, no quería entenderlo, hasta que en un sueño me cuenta de lo feliz que es en el cielo. La sueño a menudo y en sueños me habla de lo que ve.